Los estudios demuestran que el simple acto de expresar lo que siente sobre el papel puede dar lugar a una mejora de la salud física y mental, una mayor claridad de pensamientos, una reducción del estrés e incluso un sistema inmunitario más fuerte.

CÓMO:

Busque un lugar tranquilo, tome unas cuantas respiraciones profundas y vuelque sus pensamientos en el papel durante 15-30 minutos. No se preocupe si su caligrafía no es del todo legible. No juzgue el «significado» de las palabras. Simplemente deje que su mente fluya y su corazón se abra. Cuando haya terminado, tome una inhalación profunda y fíjese en que su cuerpo y su mente se sienten más ligeros.

Los estudios demuestran que las personas que anotan sus objetivos y sus tareas pendientes tienen un 33 % más de probabilidades de llevarlas a cabo. El hecho de escribirlas a mano nos ayuda a retener la información de forma más efectiva y permite que el cerebro visualice la tarea como si ya estuviera terminada antes de ponernos manos a la obra.
 

CÓMO:

Simplifique su lista de tareas pendientes de forma que no contenga más de cinco elementos, y escriba las más importantes o difíciles de llevar a cabo al principio. La precisión es clave: cuanta más clara sea la información, más fácil le resultará a su cerebro materializarla. A fin de cuentas, hay pocas cosas más reconfortantes que tachar una tarea completada de una lista de cosas por hacer bien hecha.

Si sentarse y contar las respiraciones no es lo suyo, pruebe con la escritura a mano. Se ha demostrado que aumenta la actividad neuronal en zonas del cerebro de forma similar a la meditación. Además, trazar formas caligráficas con tinta sobre el papel equivale en cierto modo a dibujar, lo que contribuye a la comprensión de la armonía y el equilibrio visual de las letras y los caracteres.

CÓMO:

Elija una cita, un poema, una letra de canción o una frase y saboree cada movimiento del artículo de escritura sobre el papel. No se preocupe si no es perfecto; simplemente disfrute del proceso.

Escribir es un excelente ejercicio que sirve para cultivar la capacidad de prestar atención y apreciar esos momentos únicos que nos ofrece la vida cotidiana. Al preservarlos en notas escritas a mano, puede regresar a ellos y revivir esos pequeños instantes de belleza.

CÓMO:

Lleve encima un cuaderno y, en cuanto note o piense algo que dé pie a cualquier tipo de emoción —divertida, hermosa, sorprendente, placentera o triste—, anote la fecha, la hora y su observación en una sola frase. Cuando se juntan, estos momentos fugaces se entrelazan para formar el poético tejido de la vida.

Cada uno de nosotros tiene su propio estilo de escritura a mano. Mientras que un texto escrito a máquina puede resultar impersonal, una nota o una carta escrita a mano está llena de emoción, energía y dedicación. Las cartas escritas a mano no son solo un pasatiempo romántico teñido de nostalgia. Son una manera única de crear una conexión significativa con otro ser humano.

CÓMO:

Tómese su tiempo para redactar una carta a un amigo con el que hace tiempo que no habla, o sorprenda a su pareja o compañero de piso con una nota positiva escrita a mano. Podrá sentir de inmediato los beneficios de escribir a mano y deseará compartir su energía con los demás.

Si necesita más inspiración, eche un vistazo a los hábitos de escritura de la familia y los amigos de Montblanc en el reto #InspireWriting de nuestra página de Instagram.